Tango, la sonrisa de Carlos Gardel y Milonguita.

Tango, la sonrisa de Carlos Gardel y Milonguita.

Tango es la muestra que Susana Delgado, la artista mendocina experta en grabado, expuso en el Foyer del Auditorio de la UOCRA, en Almagro.

Dicen de mí, Milonguita, Fumando espero, Rojo Tango, En la pista son algunos de los títulos que forman parte de la obra.

Susana Delgado - Ensimismados 2002

Entrevista a Susana Delgado, a cargo del Departamento de Cultura de Casa de Mendoza.

—¿Dónde naciste?

—Nací en Godoy Cruz, provincia de Mendoza, como mi padre. Hace muchos años vine a la ciudad de Buenos Aires, donde nació mi madre, y me atrajo como un imán. Viajé por unos meses porque quería perfeccionarme con maestros y me quedé, pero nunca me desvinculé de Mendoza. Tengo lazos que me llevan y me traen.

—¿Qué lazos se formaron y le dieron forma a tu obra?

—Recientemente, expuse una selección de grabados y dibujos de tango en el Foyer del Auditorio de la UOCRA, en Almagro. Ya la había expuesto, con variantes, en la Academia Nacional del Tango en 2009, y el año pasado en la Galería Nacional Múltiple de San Telmo. Son obras que nacieron con el tiempo; la más antigua se inicia en 1993 y llega hasta esta fecha: hay grabados en blanco y negro, en color, hay dibujos y retratos de tangueros conocidos, como Carlos Gardel, Enrique Santos Discépolo y Enrique Cadícamo.

—¿Qué tomás del tango para expresarlo en tu arte?

—Las letras. Me interesa lo urbano y sus personajes, que se presentan con cierta marginalidad: el origen del tango está vinculado a lo
prostibulario; ha cambiado, pero en sus orígenes fue así. Los personajes me resultaron atractivos para dibujar. Ilustré las tapas de la revista El Abasto, en las que juego con imágenes que juegan con movimientos y encuentros de hombres y mujeres.

—Me recuerdan a Tolouse Lautrec…

—Sí. Tiene que ver con la historieta y el cómics. Lautrec es mi artista favorito en la presentación de las mujeres del cabaret, los colores, las expresiones y los gestos que transmiten estados de ánimo. Tomo lo actual y lo mezclo con la reminiscencia, el machismo que se empalma con la nostalgia. ¡Y sobre todo, con una mujer provocadora!

—¿Cómo definís tu obra?

—Un poco expresionista por los rasgos exagerados y de afiche que me inspira en Toulouse Lautrec, que usaba tintas planas y coloridas; el rojo y el negro se destacaban.
En los temas relacionados con el tango, los personajes parecen ser reales cuando se besan, se acercan o se miran. La sensibilidad del tango hace y produce esa aproximación. Los turistas extranjeros lo eligen por ser un fenómeno que mueve al mundo.
Susana Delgado - Milongueando

—¿Qué críticas recibiste de Tango…?

—Muy buenas. Se hablaba de la vinculación del cómics, del expresionismo y una línea precisa en el grabado casi obsesiva, prolija y fuerte a la vez, muy firme en el dibujo del cuerpo. Todos los personajes se comprometen con lo que hacen.

—¿Qué técnicas utilizaste hasta hoy?

—Tengo mucho para experimentar; pasé por el agua fuerte, que es un trabajo en metal carcomido por ácido. Se dibuja la línea y se protege la chapa con barniz; luego se delinea con una punta y en la zona liberada del barniz; se introduce en una cubeta con ácido y, al sacar la chapa, quedan los surcos: son procedimientos artesanales, pero hoy elijo la xilografía.

—¿Qué elementos se utilizaron en las figuras de la galería donde desfila Carlos Gardel y la Morocha argentina?

—Hay carbonilla, pastel, lápiz de color, algo de acuarela; me gusta el dibujo también.

—¿Por qué elegís a Gardel?

—Lo veo como personaje atractivo. Vivía la noche, la bohemia. Su imagen es seductora; la voz, impecable. ¡No pasa de moda! Siempre está presente en mi creación por el mito y la leyenda que se inscriben alrededor de él.

—¿Cuál es la diferencia entre xilografía y serigrafía?

—La primera se talla en madera y la segunda, en tela de seda tensada en bastidor y se bloquea; una parte queda libre y la imagen se pasa a la tela estirada por métodos varios o a mano. Tenemos la madera de taco, la matriz a partir de la cual se hace el grabado: si tiene colores, se hace una para cada color.

—¿Qué te gusta tomar de las expresiones?, ¿la alegría o la tristeza?

—Depende del momento, también rescato cierta picardía. En cuanto a los colores, elijo el blanco y negro: tienen una fuerza particular; el color tiene su encanto, combinarlo es la magia, depende de lo que quiero combinar.

Susana Delgado - Fumando espero 2007

—¿Dónde presentaste la pintura de Carlos Gardel en la que está con varias mujeres sonriendo?

—La hice para la exposición realizada en Pan y Arte, Centro Cultural y Arte mendocino en Boedo.

—¿En qué lugar te ubicarías si fueses una de ellas, que por cierto lo admiran?

—No me veo platinada, ¡pero sí me veo espiando la escena!

—¿Hacia dónde mira Gardel?

—Mira al espectador, los mira y dice: “Este soy yo. ¡Las mujeres se mueren por mí!”.

Patricia Ortiz

Dejar un comentario